La actividad, desarrollada el 11 de septiembre pasado en la Escuela Nacional de Pesca «Comandante Luis Piedra Buena» de Mar del Plata, surge de un esfuerzo conjunto por implementar mejores prácticas en la actividad pesquera. Del taller participaron 37 personas, entre alumnos de los cursos de pilotos de pesca de primera y el curso de nivelación académica para piloto de pesca.
El propósito de estas capacitaciones es contribuir a la formación del personal embarcado para promover la adopción de buenas prácticas para la reducción de la captura incidental de las aves marinas. Además, se presentó la Bitácora Electrónica de Pesca Argentina (BEPA), una herramienta que facilita a los capitanes la carga de la información sobre captura incidental de especies de valor especial.
Esta iniciativa es organizada por el Foro para la Conservación del Mar Patagónico y Áreas de Influencia junto al Observatorio de Formación y Capacitación Pesquera de la Escuela Nacional de Pesca, en el marco del Proyecto MaRes para reforzar la resiliencia de las Áreas Marino Costeras Argentinas, que cuenta con el apoyo de la Unión Europea.
El taller fue implementado por Aves Argentinas, Fundación Vida Silvestre y Fundación Cambio Democrático..
Rafael Alberto Guiñazu, secretario de Extensión y Vinculación en la Escuela Nacional de Pesca, manifestó: “El Observatorio de Formación y Capacitación Pesquera de la Escuela Nacional de Pesca trabajajunto con el Departamento de Enseñanza para fortalecer todos los temas que no están dentro del diseño curricular, fundamentalmente, aquellos que promueven el enfoque ecosistémico de la pesca como la implementación de Líneas Espantapájaros y la Bitácora Electrónica de Pesca Argentina. Estos talleres brindan información valiosa a los futuros oficiales y capitanes, tanto hombres como mujeres.”
Medidas de mitigación a la captura incidental
La interacción con buques pesqueros constituye la principal amenaza para la supervivencia de aves marinas como albatros y petreles. Cada año, miles de estas aves mueren por colisiones o enredos con las artes de pesca.
El uso de las líneas espantapájaros (LEP) es una solución efectiva, simple y económica para mitigar este problema. Estas líneas, compuestas por cuerdas con cintas de colores llamativos, crean una barrera visual que disuade a las aves de acercarse a los cables o anzuelos.
Su uso en barcos de pesca con palangre y congeladores arrastreros es obligatorio en Argentina de acuerdo a la Resolución 03/17 del Consejo Federal Pesquero. Sin embargo, y por diferentes razones, la implementación real de las LEP es muy baja.
A través de talleres y asistencia técnica lideradas por Aves Argentinas, se espera fortalecer las capacidades de los trabajadoras del sector pesquero para contribuir con el cumplimiento de la normativa y lograr la preservación de las poblaciones de aves marinas.
Leandro Tamini, Coordinador Programa Marino de Aves Argentinas, expresó: “Tener a la Escuela Nacional de Pesca como socio estratégico del Proyecto MaRes es de suma importancia dado el rol fundamental de esta institución en la formación del personal embarcado. Para nosotros, como organizaciones ocupadas en la conservación marina, es un ámbito riquísimo en ideas, opiniones y argumentos para mejorar y ampliar nuestra relación con el sector pesquero”.
Bitácora Electrónica de Pesca Argentina, una herramienta para facilitar las buenas prácticas pesqueras
En la búsqueda de fortalecer las estrategias de mitigación de la captura incidental, Fundación Vida Silvestre Argentina en conjunto con armadores y capitanes de pesquerías argentinas, han diseñado la Bitácora Electrónica de Pesca Argentina (BEPA). Esta aplicación, de acceso libre y gratuito facilita a los capitanes el registro y transmisión electrónico de datos de capturas y esfuerzo pesquero a través de dispositivos móviles, y a los armadores, realizar un seguimiento eficaz de la pesca a través de un sitio web.
Además, la aplicación permite documentar tanto las especies comerciales retenidas como las capturadas incidentalmente. Al articular con los requerimientos de las autoridades de aplicación y la necesidad de información de los proyectos de mejoramiento pesquero, facilita el cumplimiento normativo y contribuye a la certificación de productos pesqueros. Los datos generados son esenciales para conocer el impacto de la captura incidental, evaluar el desempeño de las medidas de mitigación y promover un enfoque ecosistémico de la pesca.
Verónica García, Especialista en Pesca Sustentable de la Fundación Vida Silvestre, señaló sobre la implementación de la BEPA: “Los capitanes son los que definen la forma de pescar en el mar, por esto es fundamental que sean ellos quienes incorporen durante su formación el concepto de enfoque ecosistémico de la pesca. Contar con una aplicación electrónica, facilita al capitán la carga de la información de su viaje de pesca y permite registrar información de otras variables necesarias para implementar este enfoque”. .
Esta actividad se realiza en un marco de trabajo colaborativo para el abordaje colectivo de los desafíos más urgentes que enfrentan nuestros océanos y costas. A través de la adopción de tecnologías innovadoras como el uso de Líneas Espantapájaros (LEP), la instalación de cámaras de seguimiento y la implementación de la Bitácora Electrónica de Pesca Argentina, se espera contribuir al fortalecimiento de buenas prácticas pesqueras que faciliten la coexistencia entre las actividades humanas y la conservación de la biodiversidad marina.