En la última década, las costas de la Provincia del Chubut, y sobre todo sus Áreas Costeras y Marinas Protegidas, evidenciaron un aumento de la acumulación de plásticos en las playas, en su mayoría de origen pesquero. Esto motivó que, más allá de las acciones llevadas a cabo por organismos de gobierno, se generen múltiples actividades autoconvocadas de limpieza con el fin de restaurar las áreas costeras y mitigar sus impactos.
Estas limpiezas voluntarias se realizan en base a un compromiso ambiental por parte de asociaciones vecinales, organizaciones de la sociedad civil, propietarios de establecimientos y municipios. Sin embargo, es necesaria una mayor articulación y adecuación de las acciones a las normativas vigentes a modo de ordenar, regular, optimizar recursos, aunar esfuerzos, contemplar los calendarios de fauna y gestionar los accesos a propiedades privadas. Además, en los casos en donde las actividades se desarrollen en Áreas Protegidas, es imperativo calendarizar las acciones, tener conocimiento de los planes de manejo y zonificación vigentes y contar con una guía de procedimientos de carácter público.
En este contexto, la Mesa Técnica de Residuos Pesqueros de la Provincia del Chubut conformada por el Ministerio de Turismo y Áreas Protegidas, la Secretaría de Ambiente y Control de Desarrollo Sustentable y la Secretaría de Pesca, realizaron este encuentro con el objetivo de recopilar recomendaciones que tomen en consideración todas las visiones y experiencias para conformar un manual de buenas prácticas para la limpieza costera en las Áreas Protegidas de la Provincia. La iniciativa fue co-organizada junto al Foro para la Conservación del Mar Patagónico y Áreas de Influencia y contó con el acompañamiento de la Administración de Parques Nacionales a través del Parque Interjurisdiccional Marino Costero Patagonia Austral y el CCT CONICET-CENPAT.
“El abordaje de problemáticas socio-ambientales como la contaminación por plásticos de origen pesquero, requiere de una legítima integración sectorial para el desarrollo de lineamientos de trabajo conjunto y articulado. Es por ello que concretar este primer encuentro era una tarea pendiente. Ha sido una experiencia enriquecedora y necesaria” (Diego González Zevallos, CONICET y Proyecto MaRes).
El evento reunió a diversos perfiles de investigadores, recuperadores, recicladores, propietarios, empresarios, voluntarios, representantes locales de agencias gubernamentales y organizaciones de la sociedad civil, con un objetivo común: coordinar esfuerzos, generar recomendaciones específicas y avanzar hacia un modelo participativo de gestión costera .
Este propósito se construye a través de espacios de diálogo, escucha y participación, que facilitan el entendimiento mutuo, la gestión colaborativa y el trabajo conjunto hacia soluciones integrales.
La actividad se enmarca dentro del Proyecto MaRes, con el propósito de reforzar la resiliencia de las áreas costeras y marinas protegidas de Argentina, y es financiada por la Unión Europea.
Ejes clave del debate
El encuentro posibilitó un valioso espacio de intercambio entre actores vinculados a múltiples acciones de remediación y limpieza de las costas afectadas por los plásticos provenientes de las actividades de pesca.
Entre los temas destacados, surgen desafíos comunes vinculados a la logística de las actividades como la selección de sitios, a menudo ubicados en zonas remotas y de difícil acceso. En la misma línea, se abordó la planificación de la disposición final de los residuos para garantizar una remoción rápida y el correcto tratamiento de los materiales recuperados, donde la articulación con organizaciones recicladoras y la selección de tecnologías adecuadas es fundamental.
«Compartimos la preocupación de no naturalizar en el paisaje los plásticos» dijo en la apertura de Mirta Lewis (Directora del CCT CONICET-CENPAT)“. Este llamado no solo apunta a evitar que los residuos se conviertan en parte del entorno visual, sino también a prevenir un mayor deterioro en los valores de conservación de las áreas protegidas”.
De modo adicional, dado que se trata de Áreas Marinas Protegidas con planes de manejo y valores de conservación específicos, resulta clave considerar la normativa asociada y los calendarios faunísticos para minimizar el impacto de las actividades de limpieza en el entorno.
Otro punto sobre el que los participantes consensuaron fue la necesidad de generar una base de datos común que permita a todos los equipos de limpieza participar de la actualización de los indicadores de seguimiento. De esta manera, se podría mejorar el monitoreo, evaluación de la problemática y el impacto de las acciones de limpieza a largo plazo.
Los participantes reconocieron el papel fundamental de la concientización y comunicación como una herramienta para romper la brecha entre la percepción social de “nadie hace nada” y las acciones que se llevan adelante y no están bien visibilizadas, lo que también promueve la desinformación.
Estrategia integral y próximos pasos
A partir de los resultados de este encuentro, la Mesa Técnica Provincial y el componente de reducción de plásticos de origen pesquero del Proyecto MaRes, producirán un documento formal de procedimientos. Dicho documento incluirá los ajustes y sugerencias de todas las partes intervinientes y será insumo principal de un manual de buenas prácticas de limpiezas costeras con el objetivo de brindar una guía para futuras acciones de limpieza y conservación en las Áreas Marinas Protegidas de Chubut.
Este manual se sumará a la estrategia integral de reducción de plásticos de origen pesquero, que incluye censos, limpiezas, recolección, destino final de los residuos y sistematización de información. También se complementará con otros objetivos del Proyecto MaRes vinculados con relevamientos aéreos para identificar zonas críticas, capacitaciones dirigidas a actores clave y la implementación de buenas prácticas portuarias para evitar que los cajones de pesca lleguen al mar.
«Nadie puede hacer todo, pero todos podemos hacer una parte»
La limpieza de costas no es solo una acción técnica, sino una construcción cultural. Como señaló Nadia Bravo, subsecretaria de Conservación y Áreas Protegidas: «nadie puede hacer todo, pero todos podemos hacer una parte». Este encuentro no solo es importante por los acuerdos alcanzados, sino por su enfoque integrador, que reconoce la diversidad de actores, realidades y desafíos.
La conservación de las Áreas Naturales Protegidas no será posible sin una corresponsabilidad genuina, donde cada sector asuma su rol y contribuya desde sus capacidades. En este sentido, el evento permitió visibilizar que la protección de las costas es el principio de una nueva relación con nuestros ecosistemas marinos y la comunidad.